BITÁCORA DE UN PERRO

[Primera noche en el CMLP]
Nos habían sacado la mierda, durante todo el día y nos tocó hacer la cama de noche.
Yo; para variar, me encontraba en un lugar donde jamás pensé estar (la historia de mi vida, no siempre llego o hago algo por mi propia intencion; pero siempre aprendo algo y no es queja, solo lo digo) bueno ya estaba encuartelado, todo había pasado tan rápido y tan despacio; aunque parezca contradictorio.
Mi compañero de camarote, Enesto Tello Suárez quien sería a la postre mi compañero en 5to año, al que le pusimos «ñajañaja» por su peculiar forma de hablar y los frenillos que se manejaba jejeje!
Ya nos habíamos puesto los pijamas, y alguien había ordenado apagar las luces y quedaba el foquito rojo, ese que parecía de burdel; el cual como decía Juan Velásquez, esperaba el cadete Luis Martínez, al que le habían puesto «vampiro».
Al frente estaba un pata que se metió un montón de huevadas en la cara, diciendo que era para proteger su cutis, era Jaime Pajares y yo decía «maricón de mierda», parece mujer; mientras ya eran inpedeceredas las perras de un chinito… gordito él, Víctor Yamamoto; mientras un desgarbado muchacho comenzaba a hablar y hablar, era Juanito Velásquez.
Era tal vez, la manera de disimular su miedo o asombro, de todo lo vivido ese día.
Pero como dice Marc Anthony…
«Y hubo alguien»
Sí, ése fue David Rodríguez, quien lo invitó a callarse primero y como Juanito seguía hablando, empezó a retarlo desde su cama, ya se había encendido la contienda entre ambos, pero estábamos tan hecho mierdas esa noche, que todos replicaban y se empezaron a formar las parejas «y no para bailar» como dice un relator deportivo, y comenzaron los saludos de un estilo poco ortodoxo, hacia nuestras madres.

Recuerdo las sacadas al fresco para el día siguiente jajaja!
Hasta que llegó un tipo bajito en pijamas, era Lincoln Blacido Trujillo nuestro primer monitor; prendió las luces y nos mandó a callar y dormir nuevamente.
Yo en realidad, ya no podía dormir y me puse a pensar (que raro,no?)
«Si nos despertamos antes del toque de diana y hacemos las camas de día, estaríamos siendo los primeros en la formación» ya que habían dicho que tomarían los tres últimos, en la formación de la mañana siguiente.

Pero no contaba con un pequeñísimo detalle; que las ventanas estaban sucias por fuera y desperté a la cuadra B como a las 3:45 de la mañana… Que loco, no? fue definitivamente demasiado temprano creo y con las luces prendidas, casi listos para ponernos los uniformes de faena, entró nuevamente «el chato» y lo que vino… fue sacadera de mierda! (SDM)
A ranear, planchas y por último rampamos debajo de los camarotes, menos mal que los pisos estaban brillando.
Luego nos mandó nuevamente a hacer la cama de noche y después de pasar revista, ordenó apagar las luces y todos en silencio a dormir!

Pero de pronto se escuchó… «todo por ese loco CSM»
Y yo, cínicamente respondí «Si púes, loco de mierda»
Y comenzaron los «ya carajo, dejen dormir»
Velásquez y Rodríguez se seguían sacando la mierda desde la cama, Muente tomó la actitud de tristeza, Ostolaza le llegaba al pin… él jateaba, Poma le pedía a Pajares que no se mueva tanto, que lo deje dormir y el Chomy, nos regalaba su peculiar risa, se acuerdan?

A Ramírez le jodia no estar en su jato y maquinaba como prender la peluquería, Quispe soñaba con ser de los 4 fantásticos, Rocha solapa metía carbón, Sánchez Checa le buscaba la bronca a Salazar, a quien se le subía el dedo pequeño del pie, Talavara ya era bien diplomático desde ese tiempo, solo observaba; sin saber que tendría una canción en estos tiempos, el tra tra tra… tra tra tra!

Santa Cruz era muy sensible, de todo lloraba, Tello se complicaba inventando una groseria, hasta que dijo «concha la mierda»
Vera también era fosforito y amenazaba con ser Jurel, Yamomoto ya tenía las medias listas en «firmes» dentro del ropero, Vicuña era tranquilo supuestamente, hasta que escondió el Altimatic de Velázquez, que seguía peleando con Rodríguez, Zapata caballero nomas dormía y Moquillaza decía «ya callense, que vendrá el monitor»
Y Ruiz decía «yo les aviso tengo las orejas paradas»
Y Rossi le decía con voz refinada
«calla magciano»
Y fue un cague de risa!
Y yo, me cagaba de miedo, pensando que me sacarían la mierda después, pero parece que les caí en gracia, y lo tomaron deportivamente y desde entonces me dicen «loco»

Lo que daría, por retroceder 49 años, pero con la experiencia de hoy, sé que es imposible, pero es bueno tener ideas descabelladas, no creen?
No me responsabilizo, por las expresiones subidas de tono escritas, cualquier parecido o mentira, solo fue para provocarles una sonrisa o pura coincidencia.

Un fuerte abrazo mis Gloriosos, cuídense mucho, espero que nos reunamos nuevamente.
Dios los bendiga!
El loco🤪

BITÁCORA LEONCIOPRADINA

Un 26 de Marzo de 1973 hace 49 años, ingresaba al inolvidable Colegio Militar Leoncio Prado,  convirtiéndome así, en uno de los cadetes de la XXX Promoción; sin imaginar en ese entonces, el amor  que siento ahora por mi añorada y querida Alma Mater, forjadora de tantos leonciopradinos de glorioso y orgulloso pasado, por sus aulas e instalaciones; las cuales me recuerdan inolvidables incidencias, que con el paso del tiempo se convirtieron, en gratas experiencias.

Hoy, luego de cuarenta y nueve años quiero agradecer; primero a Dios, el haber compartido tres de los mas bellos y hermosos años de mi vida, junto a mis compañeros de promoción.
A nuestros técnicos-monitores que cumpliendo esa doble tarea, nos brindaron su primera responsabilidad  tener a cargo un grupo niños, que eran retrospectiva de ellos mismos,
totalmente inexpertos en la vida militar y que provenían de diferentes estratos sociales. A nuestros Sub-oficiales, jefes de sección, con una mención muy honrosa; porque eran como nuestros padres, viviendo con cada uno de nosotros, penas, alegrías, triunfos, frustraciones y muchas veces aconsejandonos para ser mejores personas en la vida, a pesar de sus inmerecidas limitaciones. A nuestro querido «loco»Jefe de tercer año, el gran Capitán, ahora Coronel Eduardo Solís Orihuela, quien supo ganarse un lugar en el corazón de todos nosotros, junto a nuestra madrina de promoción Maria Teresa Valle Tomisich (QEPD) siendo participes de toda reunión y celebración, por más de cuarenta años. Dios los bendiga!

A todos nuestros demás oficiales militares, que tuvieron la valiente responsabilidad de formarnos como verdaderos cadetes leonciopradinos
No en vano se dice: «No hay leonciopradino, malo».

A nuestros maestros de aulas, inolvidables profesores que con gran pedagogía supieron inculcarnos su conocimiento, que serían aceptados y añorados mas tarde, por todos nosotros.
Que lujo de maestros, tuvimos compañeros!!!

Para terminar agradecer a mi padre Heriberto, porque haciendo sacrificios económicos, logro ver realizado un anhelo personal,  tener un hijo leonciopradino, sin olvidarme de mi madre María, quien sufría la ausencia de su hijo, sobre todo los primeros meses, para luego recibir el homenaje merecido, en el Día de la Madre, nuestra primera salida con el uniforme de gala.
En general, también recordar a los compañeros, que nos tomaron la delantera y desde el cielo nos observan privilegiadamente, uniéndose con todos nosotros a gritar:

VIVA LA XXX PROMOCIÓN!!

SUPERIOR A LA MEJOR!!!

ALTO EL PENSAMIENTO

«Tres años de cadetes; hermanos para toda la vida»

Nelson Valdez